
Salud Militar Vol. 32 Nº 1 Año 2013 41
temprana, el aliento normalmente se presenta dulce. En
individuos jóvenes y de mediana edad el aliento bucal
tiende a ser neutro en condiciones normales. Ya en
personas de edad avanzada, el aliento es naturalmente
desagradable (1,4). Otros autores, no consideran la
edad del paciente como factor causal del mal aliento.
La mayoría de los autores no cree en la asociación entre
el mal aliento y el sexo del individuo (1). Sin embargo
Iwakura y col. en el año 1994 armaron que, un 70% de
los pacientes que se quejan de sufrir de mal aliento y
buscan ayuda profesional son mujeres (5).
ETIOLOGÍA
Aunque otras muchas causas no bucales estén
relacionadas con la aparición de la halitosis, entre
las cuales podemos incluir enfermedades del tracto
respiratorio, gastrointestinal y algunas enfermedades
que involucran los riñones y el hígado, se sabe que un
90 % de las causas de la halitosis se relacionan con
la cavidad bucal (1,2). La liberación de sustancias de
olor desagradable es consecuencia de subproductos
del metabolismo de bacterias de toda la cavidad bucal,
y sobre todo de las bolsas periodontales y del dorso
posterior de la lengua. Estos subproductos resultan de
la fermentación de proteínas, péptidos, mucina salival,
sangre, neutrólos, células epiteliales descamadas
y restos alimenticios, realizada por las bacterias
especialmente las anaeróbicas Gram negativas (6,7,8).
Las sustancias odoríferas, eliminadas en forma de
gases son sobre todo los sulfhidratos conocidos de
manera genérica como compuestos de azufre volátiles
(CAV) (8,9). Una tasa elevada de compuestos sulfúricos
volátiles solo resulta en un episodio de mal aliento
cuando la misma excede la capacidad de la saliva y de
los tejidos blandos para absorberlos (8). Por lo tanto,
cuanto mayor sea la cantidad de bacterias en el dorso
de la lengua, mayor será la eliminación de dichos
compuestos en el aliento bucal (1,2). Los principales
compuestos de azufre volátiles son el sulfato de
hidrógeno, metil mercaptano y dimetil sulfato. Otros
gases, que no contienen azufre en su composición,
también fueron identicados como sustancias que
potencian el mal aliento, como por ejemplo: compuestos
aromáticos volátiles (indol, escatol), ácidos orgánicos
(acético, propiónico) y aminas (cadaverina y putrescina).
Los principales microorganismos que producen estos
compuestos son: Treponema denticola, Porphyromonas
gingivalis, Prevotella intermedia, Tanarella forsythensis,
Porphyromonas endodontalis y el Eubacterium sp.
A semejanza de los adultos, el mal aliento en niños esta
relacionado primariamente con los mismos factores
bucales.
Es interesante resaltar que la presencia de halitosis
en niños no esta relacionada con la presencia de esta
alteración en sus madres. La halitosis puede ocurrir
también en niños saludables y que no hay correlación
con el mal aliento de la madre.
Es incorrecto creer que todo aliento desagradable es
indicativo de alteraciones orgánicas. Es posible encontrar
alteraciones en el aliento de niños y adolescentes
normales, por la mañana. La halitosis de la mañana
puede ocurrir debido a una brusca disminución del ujo
salival durante el sueño y al acúmulo y putrefacción de
células epiteliales descamadas, restos de alimentos y
saliva, los cuales, durante el día, son removidos por el
habla, la masticación, cepillado, acción de la lengua y
por la propia acción detergente de la saliva.
El ujo salival puede desempeñar un importante papel
en el mecanismo de la formación del mal aliento. Por
un lado, la saliva es fuente de oxígeno, lo que evita la
halitosis. En contrapartida la saliva posee sustancias
como péptidos y proteínas que favorecen el mal aliento.
Con un ujo normal, hay mayor disponibilidad de
oxígeno y menor metabolismo de péptidos y proteínas
por las bacterias bucales, signicando esto una acción
positiva de la saliva para prevenir el mal aliento.
Durante el sueño el ujo salival y la disponibilidad de
oxígeno se reducen, favoreciendo la instalación del
mal aliento matinal. Es importante saber también que
la saliva presenta la Inmunoglobulina A secretoria la
cual es el principal componente inmune secretado por
las glándulas salivales que tiene la capacidad de inhibir
la adhesión bacteriana a la supercie de la mucosa y
puede favorecer la eliminación de las bacterias de la
cavidad bucal (1).
Placa lingual
Varios estudios identican la región del dorso posterior
de la lengua como la principal fuente de producción
de CAV (1,10,11). En esa zona, se forma una placa
Halitosis en odontopediatría